domingo, 28 de diciembre de 2014

Entre el cielo y el espacio

Voy hacer recuento. Espero que sigan en su sitio las pecas después de querernos.
Las de tus mejillas las quiero haciendo órbita en mis pechos.
El espacio es como los besos, que dan vértigo. De ahí al reflejo de sujetarnos lengua con lengua.
Por eso en el amor, cuanto más miedo y vértigo da, mejor follamos.
Lo que me da miedo es no tener miedos pero no me resisto, eres irresistible.
No sé porqué eres mi "yo no quería" favorito. Somos perfectos en meter la pata y meternos mano a la vez.
Aunque yo quiero las dos.
Y a ti. A ti también te quiero.
Nunca jamás dije, y Peter Pan cambió de país.
Nos volvimos inconscientes como niños corriendo calle abajo.
Tu queriéndome coger.
Yo deseando ser cogida.

Y una vez a solas, maduramos,
(nos) crecimos. Fue como religioso. Tu acabaste crucificado en mi cama y yo adorándote de rodillas.

jueves, 25 de diciembre de 2014

Al amor y su demencia

Amor con descosidos o a retales. Que se rompió en su día y se arregló en el mío. Pero amor.
Con el beso sentido, 
como si lo vivieras en cámara lenta.
Amor con mariposas o cualquier bicho haciendo cosquillas en el estomago o mejor, mas abajo.
Amor de llorar porque si. 
Sin motivo. Los motivos para cuando no te quiera.
Amor de follar en la cama de madrugada y hacer el amor los domingos por la tarde, 
con las migas del desayuno del sábado, que pinchan.
Como cuando acercas tu barbilla a la cara oculta de mi luna.
Amor acertado a pesar de ser el segundo plato, el tercero y a la cama sin postre.
Amor de sofá donde cada uno tiene su sitio: yo encima tuyo y tu sobre mi.
Amor con sabor a misterio, a dudas, a miedo. ¿Me quiere? 
Por eso es amor, por ser incierto a veces.
Amor con error para unos 
convertido en acierto para mi.
Arrollador, intenso, agudo, amplio, grande.

Y doy un trago largo a mi copa de vino, mientras te miro de reojo....

viernes, 19 de diciembre de 2014

Las buenas noches

Ven a darme las buenas noches,
con ese beso de 'como te quiero'.
Tengo el nivel del mimo con aforo ilimitado, ven a verme.
Ven a susurrarme al final del día antes del peso de la madrugada.
Y digo peso porque no sé si vas a venir.
El cielo se tiñe de rosa, 
como esas braguitas que te gusta quitarme.
Luego pasa a violeta, azul, gris, oscuridad. Noche.
¿Vas a venir?
Pienso hacer que duermo, 
que no siento tu aroma.

Llegas en la hora calma de la noche.
Y yo lo que quiero,
es tempestad hasta la madrugada.

martes, 16 de diciembre de 2014

Si no estás

Es irte y ver morir al verano.
El cielo de mi boca se nubla y la lluvia ya no me parece romántica.

Las perchas acogen el peor abrigo para este invierno repentino, la soledad.
No entiendo que a ese sentimiento tan triste le pusieran un nombre tan bonito.

De repente al reloj le cuelgan las manecillas y deja de marcar las horas. Con esa expresión de hombre triste con bigote. 

Un gorrión cae del nido huérfano por culpa de un gato que no maúlla.
La naturaleza se queda tuerta.

Se levanta viento pero no mi falda y mis piernas pierden kilómetros.
Me vuelvo torpe de andares y lenta de pasos. Los tacones tornan mudos.

Mi pelo añora tu aliento y mi boca ya no es fruto prohibido. Es solo fruto. Madura. Y cae.

Yo ya no despego al día, yo lo paso a trompicones. No hay nada interesante que vaya a suceder si no estas cerca. La noche se adelanta y nunca llego a tiempo a las buenas noches. Me duermo en los andares que daré para vernos.

Es irte y es como ver el capítulo de cuando nos conocimos pero al revés. O como cuando estas a punto de morir y ves tu vida pasar.
A mi me pasa eso: es irte y veo a 'mi vida' (tu) pasar.

viernes, 5 de diciembre de 2014

Naturaleza

Te deseo tanto que la humedad me ahoga.
Me vuelvo selva, húmeda y salvaje.
Es como sentir que formo parte del origen de todo, que a la vez no era nada.
Pasamos por todas las estaciones.
No de tren, ese que me arrolle, como la vida.
Sino las que nos hacen ser marea alta y baja, ser calma y tornado.
Pasar frío cuando estas lejos y hacer una fiesta cuando llego a tu verano. Comerte las flores que crecen en mi pelo y enredarte con las raíces de mis piernas.
Suspirar en otoño por la caída de tus besos. 
Oír el eco del crujir de mi espalda, a tus pasos, a mis lamentos.

Seamos lluvia y arrasemos con todo. 
Como esas bocas que se desencajan entre besos y dentelladas.

sábado, 29 de noviembre de 2014

Qué pasa ahí fuera?

Hace un día de perros,
pero a mi no me importa. 
Tengo en mi cabeza nuestros atardeceres, tus besos con los míos y mi vestido tirado por el suelo.

Afuera, el viento azota fuerte.
Pero yo tengo en mi cabeza (y en otra parte) el eco de otros azotes.

Las ventanas silban cuando el viento pasa travieso entre rendijas.
Como tu, cuando lo haces entre mis piernas.

Supongo que debe hacer frío fuera. Lo dice el abrigo de esa señora que pasa indiferente a mi mirada.
Pero a mi no me importa. Lo corporal a lo corporal me hace leña para tu invierno.

Te pienso y me quedo en blanco. Aunque tu sabes que cuanto mas callo, más sueño y por eso más escribo. 

Si no fuera por el calendario no sabría que estación vivimos.
Pero tenerte cerca es la mayor de las confusiones y la mejor de las recaídas.

He activado el paracaídas de los sentimientos contigo y tengo la anilla preparada. 
O estiro o mantengo mi caída libre.

martes, 25 de noviembre de 2014

Su espalda

Recuerdo su espalda,
de lo colgada que viví mucho tiempo de ella.
De lo que me gustaba treparla
y una vez arriba,
de lo que me gustaba lanzarme al vacío.
Yo creo que por eso la adornó con un tatuaje, 
para dejarme indicado 
mi punto de origen y el lugar donde morir después, todo en uno.

Su espalda o un mero intento de encontrar la felicidad lejos de ella.
Una cumbre alcanzada por pocas.

Su nuca, ese rincón donde olvidarse del lugar de procedencia.
Hacerlo mío amueblandolo de susurros y de intenciones, 
de malas intenciones.
Ir bajando como funambulista de tus sueños,
Acróbata de escalofríos,
Domadora de vértebras.

Su espalda,
ese muro de contemplaciones
o de lamentaciones,
depende de si viene o se va.

Un día colgué los besos en ella.
Y me fui.
No sé si pasaron mas tiempo ahí colgados o se mudaron a su boca.
El caso es que a veces,
se me reseca la garganta
y se humedece mi corazón.

domingo, 23 de noviembre de 2014

El olvido

Es como ver alejarse un barco mar adentro.
Yo en tierra firme, tu en lejanas aguas.
Cada vez mas pequeño. Hasta ver como te engulle el horizonte.

El olvido, ese sentimiento que lleva guillotina. Que va sesgando los 'nosotros' y los 'te quiero' que existieron una vez.

No me consuela pensar como Benedetti, que dice que el olvido está lleno de cosas.

Solo me preocupan los naufragios. Que la nave acabará en el fondo pero dejará la superficie llena de objetos que hablarán de aquel 'fuimos'.
Y seguro que la marea terminará trayéndolos a la orilla de mi isla.

sábado, 8 de noviembre de 2014

Me gustas tanto, tonto

Cuando llegas, el invierno hace la maleta.
Me gustas más que los helados de strataccela junto a la playa.
Es verte llegar y la sonrisa ya no es solo un decorado del paisaje. Mis ojos se hacen tuyos porque se llenan de ti. Y mi boca, ay! Mi boca.
La llevo llena de mil maneras de besarte. Se me escapan por las comisuras. Así como el hambre que ya no cabe mas tiempo escondido ahí.
Me gustas tanto que me rebosas la poesía. Eres esa gota que cae para formar un desastre con mi amor esparcido por el suelo.
Es vergonzoso contar las ganas que de ti tengo. Un escándalo.
Eres mi catástrofe favorita, amar hasta el desconsuelo, querer a mil besos de altura, follar desde fuera hacia dentro y explotar pringándolo todo de nosotros.

viernes, 7 de noviembre de 2014

Recuerdas?

Recuerdas cuando fuimos calándonos los ojos sin vernos?
Te acuerdas?
Recuerdas cómo nos devorábamos sin la boca?

Cuando me llovía sola cuanto mas sol me dabas?
Y como nos callábamos para oír el silencio, cargados de gritos dentro?

Te acuerdas?

viernes, 31 de octubre de 2014

Haciéndonos

Un recuerdo roza mi hombro,
una brisa hace eco y eriza el instante.
Es noche cerrada pero mis piernas están abiertas. 
Pesas estés donde estés. Dentro. O encima.
Mi cuello vibra tras el paso de tu boca y mi aliento ha perdido la inocencia de un susurro.
Me crucificas sobre la cama.
Mis manos prisioneras de las tuyas.
Tú sin, so, sobre, tras de mi.
Anulada estoy, conquistada. Tu esclava.
 
Me harto del huracán que se arremolina dentro.
Y estalla. Estallo.

jueves, 23 de octubre de 2014

Lo bonito de las ausencias es que traen poesía.

Mezclar la rabia de no tenerte y el soñar con hacerlo, da como resultado otra noche triste.
Añorar cuando fuiste posesión, 
cuando estuviste, cuando volviste, añorar un fuimos, un somos,
pensar si seremos.

Total, ahora ya, hagamos lo que hagamos, va a dolernos. Así que vamos a querernos hasta la ruina.

Como flojean las lagrimas cuando la pena aprieta.
Qué fácil y ligeras se precipitan sin ni siquiera tener un horizonte al que mirar.
Un apretón al corazón y notar el quebrar de algo grande dentro.
No hace ruido pero ensordece,
no se ve pero pesa,
no está perdido pero duele.

Lágrimas con nombre y con dueño. Como antes las risas, pero al revés.
Como puede enmudecer el amor una boca llena de palabras?

La prudencia en estos casos no debería ser solo un nombre de mujer. 'La Pruden' nos jugó una mala pasada. Y por quedarse en casa lo vio todo y dolió como nunca.

Puede un acantilado no dar vértigo? Pues eso me pasa cuando te miro a los ojos. Es imposible no sentir caer teniendo los pies en la tierra.
Eso me pasa contigo.
Caería mil veces mas si fuera preciso. Soy torpe por naturaleza.
De echo cuanto mas me aprietas la mano, mas miedo tengo de caer.

Morirme de un suspiro puede sonar exagerado. Como sobrevivir a un lunes. Pero suspirar un día entero de ausencias es supervivencia.

Un sin ti teniéndote no. No quiero condena así ni que se le parezca.

Si he de sufrir, que sea por un sin ti pero contigo. 
Por un sin mi por quererte. 
Por un contigo pero para siempre.

lunes, 20 de octubre de 2014

Tus gatos

Mi cabeza a veces, es como ese palomar plagado de aves, donde cada vez vienen más para anidar, quedarse, ocuparlo.
Y lo llenan todo de mierda.

No cabe nada mas. Hay cupo. Aforo limitado. Demasiada noria. Demasiado tío vivo. Muchas vueltas pero poca feria.

Un grito no es suficiente. Pero un grito callado desde hace tiempo puede que si.

Un grito es aire acumulado. Es lagrima seca. Es rabia fugaz.
Son los pedos del alma.

Y en cuanto pueda, dejaré que vengan los gatos de tu tejado a cometer un accidente con los pájaros de mi azotea.

martes, 14 de octubre de 2014

Te quiero y yo también

A veces te digo te quiero. A veces.
Pero sentirlo lo siento siempre. Siempre.
Me da igual que suene eco después. El silencio del suspiro es el 'te quiero yo también'.
Silencios cómodos, en el que te chocas con mis ojos. Un choque frontal. Ojos por todo.

Dos putas palabras que acomodan el alma. 
Otras abre herida de no retorno. 

Nunca le preguntes si te quiere a no ser que tengas clara la respuesta. Puede que no seas capaz de soportar la verdad de que 'sí, te quiere'.
Y no. No la soporto.
Yo solo sé que quiero darte el beso mas perfecto del mundo.
Apréndete como es. Quiero que lo eches en falta cuando no estemos juntos.
Tu ven a quererme esta noche como si fuera la única. Ven a besarme los párpados. Ven a peinar mis sueños y a calmar mi risa.
Es de noche, la noche más bonita del mundo. Y al caer quiero que me pille debajo contigo encima. 

jueves, 9 de octubre de 2014

Por qué cuando no estás, es como si te multiplicaras por dentro.

La nostalgia es ya un ritual aprendido y en la almohada no me cabe mas sueño si no es el de estar contigo.

Tu voz me suena tan lejana cuanto mas gris es el día, como esas tormentas sin truenos.

No sé si bebo para olvidarte o me bebo enteros los recuerdos de no tenerte.

A veces llueven lágrimas, y los cocodrilos del estanquen se vuelven dóciles sin ellas.

Me dejo llevar por el arrebato de los silencios. Cuanto mas callas mas grande se hace el reloj.

Tengo la veleta seca de beber tus vientos. Y cuanto menos soplas más me despeino.

Pero toda calma merece una buena tormenta. Entonces es cuando llegas.
Y se DE-SA-TA

A veces caigo a tus pies, muerdo, mastico y escupo el polvo.
Otras salgo corriendo cerrando tras de mi puertas de deseo y ventanas de soledad.
Y corro, corro lejos. Pero te huelo allá  donde vaya y mi lengua relame cualquier sombra masculina.

Pero hay un momento exacto, a una hora en concreto, de un día cualquiera, que somos tu y yo. 
Y a ese nosotros no hay rayo que lo parta ni cocodrilo que lo muerda.

jueves, 2 de octubre de 2014

Bocas, besos y besados

Besar en plata es un beso brusco? O es mas bien galáctico, de otro planeta?
Un beso no siempre cura. A veces es abrir una herida para siempre.
Y siempre es cada vez que no estés conmigo.
Los besos no siempre se dan en la boca pero siempre llegan al alma.

Tu me besas, yo te beso, nos besamos, dame un beso, solo uno, uno solo, muchos besos, besos por todo.

No tengo un beso favorito pero eres mi favorito a quien besar.
Y que recuerdes mi boca por un lado y mis labios por otro, que no es lo mismo.

Boca compartida, besos contagiados.
Boca insensata, loca, arriesgada.

Cual es la condena a los besos robados, cárcel de boca cerrada o fianza lamiendo tu barrote?

Cuando llueve desde el cielo de tu boca, tus besos son un tormento.
Así que ciérrala que con mi lluvia tenemos bastante.

martes, 30 de septiembre de 2014

P(u)(a)tadas al corazón

Supongo que al corazón lo crearon para soportar putadas así.
Querer hasta el desastre de rompernos por dentro.
Darle la inteligencia de volverlo el mas tonto.
Saber que va hacia un precipicio y que en el vuelo sabrá abrir las alas.
Sabrá?
Un suicida elegante, con el mejor de sus trajes.
Y como voy hacer un corazón con estas tripas!?? 
Si siento el calor de la sangre en mis manos, 
siento el latido acumulado en besos no dados, 
siento el ruido de la indiferencia llamar a tu puerta, 
como darle una patada a todo esto que se acumula dentro?!

lunes, 29 de septiembre de 2014

Bailar por no follar

Hay veces que apareces tarareando en mi cabeza. Cuando llegas al corazón, ya eres melodía.

Soy de corazón nudista, en cuanto llegas, me despeloto el alma.
Y suena nuestra canción.

Un baile. Una lenta. Pegaitos.

No me mires a la boca que he jugado un rato con el viento y la tengo cortada. 
Mira mis sonrojadas mejillas y veras como parpadean mis pezones.

Y bésalos. 
Bésalo todo como lo ames. O ámalo como lo beses. Tu mandas.

Estas muy cerca- te digo con los ojos cerrados y la boca entreabierta.
Y pronto estaré dentro- me sugieres.

Un vaivén donde todo baila con todo. Mis pies descalzos de puntillas frente a tu altura.
Los hombros alimentando nuestro enfrentamiento. 
Mis pechos erizados peinando tu respiración. 
Mis ojos me miran las ganas que escondo dentro. 
Mis oídos se 'escalofrian' al escucharte cerquita.

Y si todo eso no fuera suficiente, tus manos gobernando mi cintura. 
Una anarquía donde pierdo toda autoridad.

Hasta que el baile deja de ser baile cuando nuestra ropa interior se enamora del suelo.
Y entonces empieza la guerra.

domingo, 28 de septiembre de 2014

Uno para salir del paso de mis ganas

Tengo un bote lleno de ti.
Y se me suministra a cuenta tus.
Nunca es suficiente, porque suficiente es poco.
El bote se va gastando y yo quiero mas.
No es que quiera mas de ti.
Es que lo quiero todo contigo.

sábado, 27 de septiembre de 2014

Adioses y hasta nuncas

Si al adiós no le sigue
un jarrón estampado contra la pared,
no hay ruptura que valga,
ni amor que se aprecie.
Ha de ser un escándalo.
Las rupturas silenciosas preceden a saludarse girándose la cara.

O desbordarte el alma a preguntas.
Cuantas respuestas eres capaz de dar?
Si no hay odio en ese final, no fue amor.

Cuanto odio puede pasarnos por encima, hasta volver a los te quiero?
O cuanto amor ha de atravesarnos hasta querer empujar al otro,
precipicio abajo.

Cuanto tiempo tiene que pasar
para que al oír tu nombre no me desmorone?

Se puede adivinar un corazón roto,
habitando dentro de un cuerpo
que deambula por la calle?
Cuantos vivos muertos se cruzan por la calle?

Cuantas lágrimas pueden soportarse
en el nudo de una garganta?
Cuantas han de reunirse para ser mar?  

martes, 23 de septiembre de 2014

Dios existe desde que te conozco

Pagaría millones por volver al paraíso de tu boca.
Llegaría en barca 
y me tiraría de ella 'en marcha'.
Y llegar a nado a tu orilla.
Como ese náufrago hambriento,
arrastrada por la orilla de tu lengua.
Mojada ella, mojada yo.

A 'gatas' pero como las 'perras'.

Jugarme a cara, la que lames las mejillas, 
o cruz, de donde me cuelgo hasta que vuelvo a verte,
donde quiero suicidarme: 
si en tu cuello o en tu abdomen.

No existe mejor paisaje
que tus brazos crujiendo mi cuerpo,
ni mejor melodía que tu piel 
chocando con la mía.
La lluvia ya no es la banda sonora de los tristes desde que tus dedos le sonríen a mi coño.
Hasta que me hago borrasca y me precipito.
No quiero que las sabanas huelan a ti. Quiero que tu, sepas a mi.

Que el día festivo no sea ese día rojo en el calendario.
El festivo lo anunciaran ciertas marcas en mis muslos.

Eres de mirada incendiaria cuando la compartes con la mía,
y viertes cenizas en mi pecho.
Me soplas el pelo de la nuca,
me coronas estirándome la coleta,
hasta que escupes la lava sobre mi espalda.
Y luego apagas mi incendio
con tus manos encharcadas.

martes, 3 de junio de 2014

Ven

Ven a rescatarme de todo lo que no creo de mi,
Ven a llevarte esto que no soy yo.
Ven y devuélveme a como era, que no me gusto así.
Ven a decirme como me quieres,
Ven y recordemos lo que fuimos estando juntos.
Ven, quiero tener de nuevo esa sensación familiar, de confiar a ciegas en mi.

Ven, aunque vuelvas a irte, pero ven.

sábado, 31 de mayo de 2014

Duchas

Si lloras dentro de la ducha
se disimula más.
Puedes dejar caer las lágrimas,
así como quien no quiere la cosa.

Te recuerdo, a veces, con los ojos en  océanos.
Hasta que un gran cetáceo salta y la ola que provoca,
derrama la lágrima.
Mejilla abajo. Y la seguimos. 

Ya no está tu dedo quien la recoge,
ni el lamento que ahogas,
ni el abrazo que calma.

La ducha recoge la añoranza 
que al salir cambio por el albornoz.
dijéramos que me derramo de ti dentro, cuando fuera he ido acumulandote en mi piel en sucias caricias.

Y no por salir dejo de pensarte,
añorarte, quererte.
La lejanía ya de aquel adiós 
sólo hace que escocer en días de lluvia.
Y lo vivo de nuevo una y otra vez.

Por eso nacen estas duchas.
Las de llorar en paz, y que los ojos enrojecidos sean jabón distraído.

A veces no lloro dentro de la ducha. Sino dentro de mi. Y calmo mi pena con el abrazo del agua.
¿Nunca lo habéis sentido?
Acompasar el pensamiento, las manos y el agua que cae con el estremecer del cuerpo.

Y cuando salgo me pregunto
si la ducha es calma o castigo.

sábado, 10 de mayo de 2014

Sabores

Despertar con sabor a sal en las mejillas,
de esas veces de echar de menos tanto que me sudan los ojos.

Luego aparece el sabor dulce del recuerdo, como a fresas, vainilla, canela... De relamer el pasado.

Deslizar mi dedo índice por el surco salado que dejan las lágrimas,
y acordarme de que a este cuento
no le hacía falta un final,
sino más páginas.

jueves, 8 de mayo de 2014

A las tres serán las dos

Ahora que formo parte de tu ayer, 
iré a cambiar la hora.
Y antes de que sea primavera,
seguir pensando que formaré parte
del resto de tus estaciones.

Ser tuya una hora más.
A las dos iré a besarte hasta las tres.

Y volver a ese día en que tu voz
me hizo cosquillas dentro.
Dimos la campanada y confundimos a los fieles.
Nos encontramos en un único camino
para perdernos juntos.
¿Se puede retomar el rumbo después?

En el amor no tengo límites,
suelo querer hasta el desastre.
Porque a querer nunca se olvida.
Pero a que te quieran,
uno no se acostumbra nunca.

Antes de que sean las tres 
y mi alma arañe a mi espalda desde dentro,
antes de que los silencios
escandalicen de nuevo,
antes de que en la casa haya más eco,
aunque estén todos dentro menos tú,
volveré a pensar en que el nuevo récord de salto de altura
lo establecimos tu y yo cuando
decidimos besarnos,
A dudar en que no sé si saliste de mis escritos 
o cuando te leo los ojos 
me sale lo que escribo. 

Y a las tres cerraré los ojos, 
acurrucaré mi postura
y me dormiré con la melodía
del crujido de las hojas en otoño.

miércoles, 7 de mayo de 2014

A pelo

Cartas escritas a pelo
con todas las letras sobre el asador.
Vomitadas incluso,
sin uso de signos,
en los que he de adivinar las pausas
por los suspiros que me causas.
No se cuando acabas la frase,
ni cuando piensas en mi.
Pero me desnudas en cada una de ellas.
Derramas el alma en cada renglón 
y te paseas totalmente desnudo,
descalzo y despeinado.
Roto.
Sin disfraz.
Como si al abrir la carta,
una ráfaga de viento azotara mi flequillo.

lunes, 5 de mayo de 2014

Exilios de inspiración

Escribir con el alma descamisada,
no encontrar las palabras
y coger frío.
Arrancar la hoja. Y otra.
Y dos más.
Construir sin querer una nostalgia,
una falta de inspiración,
con bolas de papel amontonadas en el suelo.
Y a eso llamarle arte.
El arte del papel mojado.

Letras que no verán la luz.
Escritos sin sentido
y que se oxidarán. 
Lo dejamos aquí.
Cementerios de poesía borrosa.

Algún día te enseñaré los cadáveres 
sin rima. 

jueves, 1 de mayo de 2014

Cuando los desiertos se hicieron habitables

Cuando te alejas,
a latidos no me gana nadie.
Retumban en el eco del desierto
de tu ausencia.
Y al caer la noche el desierto es hielo.
Sin tus días, para mi es noche.
De esas en vela, sin viento, a la deriva.
El bao anuncia que el amor esta vivo.
Haces mi letra terciopelo,
a pesar de los cactus de tu ausencia.
Y aún con esos ecos incontrolados
queda bao entre mis costillas.
Me haces tanto calor dentro,
que la humedad alimenta
los cactus de nuestro desierto. 

domingo, 27 de abril de 2014

Cuando fui poesía y me hacías pisar Marte

El imposible lejano fluía muslo abajo.
Y tu lo relamías muslo arriba.
Vértigo-me decías, cuanto más subías- túmbate-sentenciabas.

No creo que fuera la más guapa
pero mirarse en tus ojos 
era como ser equilibrista.
Te leía a besos hoja a hoja,
aquello si era vértigo.

Cada verso un suspiro por tenerte.
-No eres libre- 
decías con la mano entre tus piernas.
Pues deja de prepararme 
como si fuera sólo tuya.

Te leía cuando tenía hambre 
o no se si el hambre apretaba mis muslos 
cuando te leía.

Viajaba, volaba, lo surcaba todo. 
Hasta aterrizar en tu garganta 
para dejarte mudo el mundo.

Me dejaban sin aire tus letras 
y sabor a quiero besarte.
Y tu lo que querías era que la falta de tu aire 
fuera proporcional a la altura de mi falda.

El universo me lo enseñabas en el entreabierto de tu boca.
Un espacio amplio e infinito
donde la gravedad vacilaba a mis pezones. 

Y un día tus pupilas en tinta 
tiñeron tu camisa blanca,
esa que se ponen las recién folladas.

Ya no me mirabas, sólo me veías.
Los versos sonaban cada vez más lejos.
Pasaste página sin mojarte el dedo.

Y dicen que en Marte hay agua,
tal vez sea la humedad 
que dejaron nuestros besos.

domingo, 16 de marzo de 2014

Deja de sucederme

Zarpaste hasta el verano que vivo
cuando visitas mi entrepierna.
Anclaste tus labios y tu lengua
en mi memoria.
Y cuando abro las piernas,
mis manos,
calman tu ausencia.

Y me abandono a la locura
de creerte mío 
y pensarte suyo.

Es un pensamiento
de portazo repentino.
Como ese instante en el que tienes 
la mano agarrando el pomo
y de repente una bofetada de aire
te arranca la puerta, y da el portazo.

Y despertar de golpe.

Me refugio en el calor escalofriante de los fogonazos que atraviesan 
la sala de mi cabeza.

Un fogonazo, un instante, una palpitación. Días de abandono emocional.

Días que soy más tuya que mía.
Que cuanto más aprieto los ojos,
ya cerrados,
más siento la presión en el pecho.

Sin alivio.

Abandonos de mi, 
orfandad que espera tu acogida.
Tu adopción entre sábanas.

Deshechos, descosidos,
besos que se caen 
como los botones de las camisas.

Busca en los bolsillos
cuando mi ausencia
se congele en tu nuca.

¿Sabes que el alma también se fustiga?
Que las marcas son más visibles
que los chupones de cuellos adolescentes.

Hay besos que mojan más,
que jarros llenos de lluvia.
Miradas que nos ilusionan más,
que cuando un niño desenvuelve un regalo.
Caricias a uno mismo 
que se sienten como si fueran otras manos.
Y recuerdos que por mucho tiempo que pase,
no mueve relojes ni avanza en calendarios. 

Y se viven otra vez.

lunes, 3 de marzo de 2014

Para convivirnos

Que prefiero ahogar
las penas en tu ombligo,
que dudar de donde dejé el coche
antes de estas copas de más.

Que el olvido se sirve con hielo y buen ron.
La indiferencia para quien no bebe.
Aún así, la cuenta va a medias.

Que los "muerdos" se admiten en todas partes,
menos a otra.

Que de las dudas no se sale,
de las dudas se alimentan muchas cosas.

Que la risa no es contagiosa,
las ganas de follar si.

Que no siempre las piedras son errores,
sino un "mal que por bien no venga".

Que antes de cal fuiste piedra,
y antes de piedra, arena de mi playa.

Que si al rozar quemas,
mejor toca con ganas y moja.

Que si vas a pesar en el pecho,
me pido estar encima.

Que los animales no solo muerden o arañan,
también lamen.

Que haya ducha de tres,
cama de dos,
besos a uno.
Puñeteros números exactos que me atormentan.

Que el timbre se rompió hace tiempo
para que me llamaras a gritos.
Así no hay excusas para las llamadas perdidas.

viernes, 17 de enero de 2014

En tu eco

Eres como burlería 
que rompe ecos al aire,
Y bailo a tu son.
Repico acordes al ritmo de latidos intensos.
Besos nacidos 
desde el fondo de la garganta 
que traga suspiros manchados de soledad.
Y al olvido no le quito el ojo, 
me mata sentirlo cerca.
Roba esperanzas
y poda las ramas secas 
o pudre lo verde.
No te olvides de mi. 
Las ausencias me señalan con el dedo
y con una simple presión en mi frente 
me hunde hacia esa habitación vacía.
Vacía y llena de eco. 
Digo mi nombre para creer que eres tu quien me llama.
Y la pinto de ilusión.
Y al caer la noche 
te espero como esas señoras de chaqueta,
sentadas tiesas para no arrugarse el traje.
Y al final la única que llega es la mañana.

viernes, 3 de enero de 2014

Que te jodan

Que te jodan!! 
Que el alma se moje,
que se arrugue, 
que las planchas sean invierno
y el agua caiga seca del riachuelo.

Que sea hueco el tronco 
del árbol que trepo para verte y se parta, para que no me veas más, 
por no verte, 
por dolerme. 
Y que te jodas.

No ser más tu piedra, 
ni zancadilla ni tropiezo, 
que se allane tu terreno, 
tu vida, una tristeza lineal.
Y que te jodas.

Que las miradas de otros hombres 
sean puñales en tus palabras,
y te atragantes. 
Que sea muda tu rabia, 
que te muerdan los celos 
y no cicatrices con otra.

Y que te jodas.

miércoles, 1 de enero de 2014

Maldita eres

Cuando la realidad golpea de repente, 
como un cubo de agua fría, como un "ya te lo dije" y peor como un "si ya lo sabía".

Cuando el puñetazo te suena familiar y aún así 
sabes que tienes el botiquín lleno de tiritas,
que calmarán hasta el próximo.

Que igualmente la realidad no gasta las emociones, las aparca.

Como el juego de las sillas que juegas, giras,  te ríes del que se queda sin.
Hasta que te toca a ti y te jodes.

Como una duda en el umbral de la puerta pendiente de que salgas de ella y al portazo suena a negativa.
Realidades como prados, como cuchillos, como piedras contra una cristalera, o sea, grandes, peligrosas, cortantes...

Así que deja la tuya bajo la cama, no quiero verla. 
Como esos monstruos que están ahí y mejor no mirar.