martes, 16 de diciembre de 2014

Si no estás

Es irte y ver morir al verano.
El cielo de mi boca se nubla y la lluvia ya no me parece romántica.

Las perchas acogen el peor abrigo para este invierno repentino, la soledad.
No entiendo que a ese sentimiento tan triste le pusieran un nombre tan bonito.

De repente al reloj le cuelgan las manecillas y deja de marcar las horas. Con esa expresión de hombre triste con bigote. 

Un gorrión cae del nido huérfano por culpa de un gato que no maúlla.
La naturaleza se queda tuerta.

Se levanta viento pero no mi falda y mis piernas pierden kilómetros.
Me vuelvo torpe de andares y lenta de pasos. Los tacones tornan mudos.

Mi pelo añora tu aliento y mi boca ya no es fruto prohibido. Es solo fruto. Madura. Y cae.

Yo ya no despego al día, yo lo paso a trompicones. No hay nada interesante que vaya a suceder si no estas cerca. La noche se adelanta y nunca llego a tiempo a las buenas noches. Me duermo en los andares que daré para vernos.

Es irte y es como ver el capítulo de cuando nos conocimos pero al revés. O como cuando estas a punto de morir y ves tu vida pasar.
A mi me pasa eso: es irte y veo a 'mi vida' (tu) pasar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario