jueves, 28 de enero de 2016

Esto así todos los días

Tienes todos los ingredientes para volverme loca de amor.
Tienes los ojos perfectos para naufragar en ellos.
Mar limpio y profundo de verdes y azules,
una bonita acuarela junto al rojo de mis labios.
El abrazo que me regalas cada día,
es inversamente proporcional a las ciudades que caben en ellos.
Las mismas que quiero visitar contigo,
colgada de tu boca.
Esa boca que desata tormentas
haciéndome tragar tus tempestades,
la misma boca que sabe decir y hacer callar.
La que hace hablar y la que controla cuando tiene que callarse.
Una boca que también se convierte en hogar
cuando me sonríes.
Y deseo, desprendes deseo por cada gesto de tu cara,
por cada inocente mirada,
incluso con la indiferencia.
Como si esta humedad no fuera contigo.
Si, efectivamente tienes todos los putos ingredientes para volverme loca de amor.

domingo, 24 de enero de 2016

En mi pelo

Te invito a pasar el día en mi pelo.
Un conjunto de lianas entre mis sueños y los tuyos.
Suéñame y despiértame, 
quiero ambas cosas contigo.
Enredos asegurados y no en mi pelo.
Sí entre tu lengua y mi boca,
entre tus brazos y mis ojos,
entre tu columna y la mía.
Vértebra a vértebra crezcamos,
acompasemos los movimientos de ambas, con la armonía que nos provocamos.
Como esos juncos en primavera
mecidos por el aire.
Y bailemos al ritmo que nosotros mismos inventemos.
Marquemos la intensidad con la respiración.
Respírame, deja que mi aliento juegue dentro de tus pulmones.
Y tú entra en mi.
Escribe tu nombre de dentro hacia afuera, y cuando exhale lo pronunciaré.
Yo te invito a vivir en mi pelo,
si tú no dejas de sonreír nunca.

jueves, 21 de enero de 2016

Todo tú

Todos los besos me llevan a ti.
Todas las puertas me llevan a tus ojos.
Todos mis días me llevan a tu noche.
Todas las noches me llevan a tu día.
Todas las calles me llevan donde estés tú y no a Roma.
Todas las bocas me habla de ti.
Todas las olas me suenan a tu nombre.
Todas tus primaveras alteran mi sangre.

Todas mis letras me llevan a tu vida.

Y en toda mi vida no pensé tenerte y 
sin embargo, en ninguna vida podré agradecer el haber coincidido.

lunes, 18 de enero de 2016

Háblame de ella

Es esa chica que aun habiéndote conquistado, seguirá escribiéndote poesía como si aún no lo hubiera hecho y le dirá cosas como:
'No me dejes para mañana porque te lo quiero hacer todo hoy'
La que sale a la calle con la dignidad abrochada hasta arriba, pero llegará a su casa dispuesta a bajarse las bragas hasta abajo.
La que no querrá ser ave de paso, pero que le gustará dejar el rastro de su perfume a su paso.
La que sabrá diferenciar entre abrazar con los brazos o con el corazón.
La que dice te quiero. 
La que sabe decir te quiero con la mirada encharcada y también lo hará si el océano aparece más abajo.
La que hace el amor cuando más puta se siente y la que sabe follar cuando más princesa la hace sentir.
La que sabe defenderse usando la palabra y no la lengua.
Y la que no le hace falta subirse a unos tacones para sentirse más segura.
La que no quiere que te vayas.
La que quiere que te quedes.
La putaprincesa de tus sueños.

Simplemente la típica chica que vas a pensar que es la típica chica. 

sábado, 9 de enero de 2016

Las dos de la mañana

De nuevo las dos de la mañana
y no estamos juntos.
De nuevo mi pelo sin enredos,
y mi corazón no tiene sueño.
Una especie de pena se asienta en mi pecho,
como ese cachorro que encuentra por fin su sitio.
De nuevo se me hace tarde para dormir,
este no es mi sitio y ese no es el tuyo.
Tengo la mueca guardada y la cara sin ruido.
La vida mirando hacia arriba
y el cielo viendo pasar los sueños.
Una oveja deja de ser contada
y el rebaño queda embobado mirando tu boca.

Pero son las dos de la mañana
y la noche hace rato que empezó sin nosotros.
Se ha hecho tarde para tenerte,
pero nunca será tarde para soñarte.

miércoles, 6 de enero de 2016

Anatomía pluscuamperfecta

No me gustan las alturas
a no ser que mire desde lo alto de tu espalda.
Sin embargo no siento la caída hasta que no veo como la arqueas.
Y tus abrazos que me hacen el cuerpo pequeño y el corazón gigante.
Tu pecho aparece lleno de primaveras anticipadas,
y caigo de boca a comerme todas las margaritas,
como ese animal salvaje que busca purgarse del mal amor acumulado dentro y a esperar a vomitar 
todos los te quiero callados.
Intento medir con la mirada
cuántos suspiros de distancia hay entre tu hombro izquierdo y el derecho.
Desisto, he perdido la cuenta.
Necesito domar mi lenguaje.
Y no me refiero a la forma de comunicarme, sino al uso de la lengua. Al buen uso. Ya sabes.
Poesía es ver cómo sales de la cama
y ver cómo tu desnudez atraviesa las cortinas de la ventana, es decir, eres tú la luz que sale hacia fuera y no al revés.
Tu cuerpo, ese conjunto de piel y huesos que me hace salivar.
El envoltorio perfecto de un interior por descubrir.
El mayor de los misterios que espero no llegar a descubrir nunca del todo.
Tu cuello el mejor sitio, donde echan ancla mis labios.
El mejor complemento para mis abrazos, 
La puerta para el diálogo entre nuestros latidos.
la yugular mejor expuesta.
Y ahora apaga la luz que voy a entregarte todas mis emociones.

domingo, 3 de enero de 2016

En la puerta del colegio

Celos o un fuego cruzado.
Lo mismo da. No da tiempo ni para ver la bala perdida.
Celos o la forma más infantil de alejarnos el uno del otro.
Ahora, ahora que es cuando más cerca queremos tenernos.
Mírame a los ojos cuando te hablo.
Mírame al corazón cuando no lo haga.
Así que cuando el cielo de mi boca 
esté parcialmente nublado,
séllame la mala palabra que salga de ella.
Ahora el fuego cruzado es de miradas
y las balas perdidas encuentran el camino: directo al corazón.
Pero en lugar de caer desplomados contra el suelo,
caemos cielo arriba.
Y camino a casa me das el caramelo 
que siempre dije que no
en la puerta del colegio.
Luego hazme el amor
y deshaz la guerra que reina bajo mi ombligo.
Desata tus fantasías conmigo.
Con el hilo sobrante, cósete este abrazo de piernas,
luego deshilacha la desconfianza,
abróchate los besos hasta arriba.
Y si aún así se me cae el vestido,
déjalo que tengo ganas de enseñarte el alma.