martes, 16 de abril de 2013

Resacas de amor

Es como sentir el peso de un elefante sobre el pecho. A penas puedo respirar.
Sólo me da una pequeña tregua para lanzar un suspiro más al aire.
Y mi cabeza gira como noria sin nadie que la accione ni para que se baje ese pasajero que se ha mareado.

Y gira, gira...

Esos suspiros como pequeños aleteos de mariposa, casi mudos e inundados de ti.

Pecho preso con prohibición de sentir. Como esos domingos lapidarios que te llevan a sufrir estas resacas.

Y gira, gira mi noria interior. Y sigue mi pecho preso bajo los kilos del elefante. Aunque me pesas con dulzura dentro. Porque me das hasta donde puedes. Y lo que me das me lo bebo gota a gota. Así a mono dosis.

Pero en días de resaca como hoy, tengo una sed de beber océanos, sed de regadío en hectáreas, sed de deshielo... Sed de ti.

Y por ello me odio. Si me tuviera delante me daba un bofetón.
Ese que no te di en su momento, a modo de despedida con portazo incluido.
Pero tu no me vales.

A ti te marcaría la espalda de "te echare de menos" llenaría tu cuello de "no quiero verte más" y minaría tu pecho de letras. Así, cuando lo viera preciso detonaría en la distancia y formaría mi nombre en el cielo de tu boca.

6 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Muchas gracias Joselita! Que sorpresa, no sabes como me gusta leerte "en este nuevo mi espacio"......
      Besazos guapa!

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    2. soy tu seguidora fiel :-)
      suerte con tu nueva aventura!!!
      te voy leyendo...
      besazo

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  2. Q grata sorpresa!! Me está encantando esto!! A seguir así. Un Bikiño.

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    1. Gracias David! Tu si que me has dado una sorpresa!
      Graciasssssssssssss!!!

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  3. Todos seguidos he leido, y me encantan. Sigue escribuendo, sin prisa.
    ignaciogarcres

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